"LA CARICIA DE LOS IMPRESIONISTAS"

Baile del Moulin de la Galette, de Pierre Auguste Renoir.

Esta escuela pictórica nacida en a fines del siglo XIX, a inspiración de un grupo de artistas interesados de reflejar directamente la incidencia de la luz sobres las conformaciones corpóreas, sin detenerse a dar perfección a los trazos en su manifestación formal. Más bien los animaba el intento de capturar los colores y formas difusas que “impresionan” nuestra retina en el instante mismo del enfoque visual, muy a menudo tomadas directamente y al aire libre, ha dejado cuadros de exquisita belleza. La designación de “impresionistas” nació con una connotación despectiva; un crítico recogió el vocablo del título que Claude Monet había colocado a uno de sus cuadros y utilizó la palabra dándole el significado implícito de que la muestra se regía por la intención efectista de impresionar. Los representantes más destacados de este estilo son el ya citado Monet, Eduard Manet, Gustave Courbet, Pierre Auguste Renoir, Edgar Degas y Cezzanne. Son obras traspasadas de romanticismo y cuya contemplación, en especiales estados de ánimo, produce en nuestra alma el suave arrobamiento que es propio de lo poético. Desde ya, esta relación de efectos es totalmente personal;… pero es como honestamente la sentimos.