LOS DÓLARES QUE VOS EMITEIS ¿GOZAN DE BUENA SALUD?

EEUU, salió a enfrentar la portentosa crisis del 2008, o puesta de manifiesto en ese año ya que la incubación llevaba tiempo y daba estruendosos reflejos de tormenta desde mucho antes, atacando en primer término desde el lateral financiero. Entendemos correcta la decisión ya que el costado financiero es el que ofrece oportunidades más inmediatas de acción y en gran medida es un prerrequisito para iniciar la movilización de la economía real. Aporta además el aditamento de su impacto psicológico instantáneo sobre el factor humano, cualesquiera fuese su ubicación en el entramado de la economía.
El tema es que fueron sumas siderales, acumuladas unas a otras en un ritmo frenético de apariencias exponenciales. Resultan cifras difíciles de entender su real alcance cuantitativo. Y ya se trate de la emisión de billetes, o de la creación de moneda de cuenta, toda ella surgió de lo que aquí llamamos “la maquinita”; en otros términos es un conducto de crear capacidad de compra o de pago por vía de una decisión de imperio del poder estatal…, pero sin contrapartida. El efecto normal es que la que se da gratuitamente a unos se le quita insensiblemente a otros; y esto opera a través de lo que llamamos inflación.
No se pretende formular vaticinios, sino mas bien plantear interrogantes: ¿Cabe esperar un incremento del precio de los bienes transables en dólares, cualesquiera sea el país en que las mismas se realicen?; ¿El valor del dólar sufrirá por consiguiente un demérito?; ¿Es lógico esperar que esto ocurra en el término requerido para el cumplimiento integral de un ciclo económico, digamos aproximadamente un año?. Dejo a los bochos las respuestas.