"EL BLITZKRIEG DE AFIP-CLARÍN"

E l accionar tipo comando, integrado por numerosos “efectivos” y coordinado en tiempos y lugares, incluso en algunos domicilios privados, se pareció más al ataque de una fuerza de choque del totalitarismo más repudiable que al desempeño de un cometido gubernamental lícito.


En nuestra nota anterior del l9de agosto ppdo., en la cual demandábamos claridad en la evolución patrimonial de los Kirschner, dejamos aclarado el arco ideológico desde el donde formulábamos nuestro postulación. El mismo sigue plenamente vigente.
En el caso, insistimos en destacar la existencia de reglas de licitud primarias y elementales que no se pueden vulnerar, so pena de caer, cuanto menos, en la total descalificación política, cuando no en el ridículo y si acaso en el ámbito extremo de la legislación penal.
Esto así, por haberse elegido un modo de total espectacularidad, cuyo fin habría de resultar previsiblemente inocuo, y basado n movimientos físicos antes que la mesura que es de reclamar en la indagación y evaluaciones intelectuales; en lugar de ello se eligió un camino de TORPEZA EXTREMA RAYANO EN LO DEMENCIAL.
La ley de procedimientos en lo tributarios dota al organismo recaudador de instrumentos poderosos que habrían posibilitado que dos o tres hombres, trabajando con la infamación de que ya dispone el ente, estableciese el encuadre fiscal correcto de Clarín sin moverse de sus despachos de trabajo; y esto si así correspondiese a la operatoria natural de fiscalización, en tanto no es propio que las prioridades de investigación estén marcadas por la animadversión política; esto supondría HOSTIGAMIENTO Y AMENDRANTAMIENTO INNOBLE ADEMÁS DE ILÍCITO.
Las excusas dadas a posteriori resultan de una burda ineptitud que desafía la inteligencia de los ciudadanos.
Antes de lo acaecido, sería propio buscar solución al estado de PRIVILEGIO INDEBIDO QUE A FAVOR DE CLARÍN Y OTROS DIARIOS SURGIÓ DE LA ESCANDALOSA CNSTITUCION DE PAPEL PRENSA.

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